80.000 sirios están durmiendo en la nieve

La violencia en Siria parece no tener fin ni descanso posible. La gente se siente cada vez más asediada a medida que los bombardeos los persiguen de un lugar a otro. «No entienden por qué el Consejo de Seguridad es incapaz de detener la carnicería», asegura un alto funcionario de las Naciones Unidas.

©UNICEF/Watad
Niños que huyen de la violencia en Idlib, Siria, se refugian en un campamento para desplazados en Atmeh, cerca de la frontera con Turquía. 2019/2020

Miles de personas, que huyen del recrudecimiento de las hostilidades, soportan a la intemperie temperaturas bajo cero. Las agencias de la ONU entregan ayuda humanitaria, pero advierten que muchas personas pueden morir si no se encuentra un lugar para albergarlas.

El Programa Sundial de Alimentos  y la Organización Internacional para las Migraciones  advierten que la combinación entre la escalada de las hostilidades en esa zona del país, unido a las gélidas temperaturas invernales están causando estragos entre los desplazados.

A pesar de la escalada de las hostilidades, que esta semana causó una interrupción de 24 horas en las distribuciones, el Programa Mundial de Alimentos continúa prestando asistencia alimentaria de emergencia en el noroeste de Siria.

UNICEF
Un hospital materno-infantil en Idlib, Siria, gravemente dañado por los ataques aéreos

El pasado martes, el PMA se vio obligado interrumpir temporalmente la distribución de ayuda humanitaria debido a que el recrudecimiento de las hostilidades impidió las entregas de los camiones procedentes de Turquía que transportaban suministros.

El director regional del Programa para Oriente Medio y África del Norte, Asia Central y Europa Oriental manifestó su honda preocupación por la suerte de miles de familias que se vieron obligadas a abandonar sus hogares en pleno invierno y bajo temperaturas gélidas para huir a campamentos que se encuentran superpoblados.

El Programa especificó que solo durante esta semana se desplazaron hacia campamentos saturados en dirección norte más de 140.000 personas que tuvieron que lidiar con temperaturas nocturnas de menos diez grados centígrados.

Desde el 1 de enero, el PMA proporcionó raciones alimentarias de emergencia listas para su consumo a más de 300.000 desplazados. Estas provisiones se consumen sin necesidad de ser cocinadas y son ligeras de transportar.

Asimismo, los socios del Programa proveen mensualmente asistencia alimentaria a casi 900.000 personas.

Los importantes desplazamientos de población se deben a los intensos bombardeos en la ciudad de Atareb, en la provincia de Alepo, y cercana a la frontera entre Siria y Turquía. Desde diciembre de 2019, los ataques aéreos y los enfrentamientos armados en el noroeste del país árabe han forzado la movilización de 800.000 personas, el 80% de ellas mujeres y niños.

Niños en una tienda de un campamento para desplazados en Idlib, en el norte de Siria

La OIM advierte de una posible crisis humanitaria

Por su parte, la Organización Internacional para las Migraciones confirmó que las crudas temperaturas invernales obligan a un gran número de desplazados a pernoctar al aire libre.

«Más de 80.000 personas que se vieron obligadas a huir de la violencia en los últimos meses están durmiendo bajo los árboles o en zonas descubiertas bajo la nieve«, dijo Joseph Ashmore, coordinador mundial de refugios de la OIM.

Ashmore añadió que “muchas más personas pueden morir a medida que se acentúen las condiciones invernales extremas, lo que provocará una de las crisis de alojamiento más graves a las que se ha enfrentado el sistema humanitario en el último decenio«, añadió.

La mayoría de los desplazados se alojan con familias de acogida, en campamentos o en edificios inacabados.

Durante las últimas semanas, los socios de la OIM entregaron artículos de emergencia -como mantas, kits higiénicos y otros artículos- así como equipos de cobijo para 129.000 personas. 

El noreste también sangra

En relación con la situación humanitaria en el noreste señaló que 70.000 personas siguen desplazadas tras las operaciones militares del pasado mes de octubre, y que otras 90.000 personas viven en campamentos de desplazados, incluyendo a más de 66.000 en el campamento de Al Hol.

«Una media de 850.000 de personas necesitadas en el interior de Siria recibieron asistencia mensualmente en 2019, y ese número aumentó considerablemente durante el transcurso del año».

Credits : Noticias Onu

ESCUCHA PISO 6 RADIO ON LINE LAS 24 HORAS